
Se había quedado esperando durante dos horas en el lugar en que la había visto, pero ella no dio ninguna señal, ni luz de su presencia.
Estaba deshecho, quería ir a buscarla por toda la escuela hasta encontrarla y por fin darle la rosa que había comprado para ella. Pero cuando Zack al fin lo encontró se lo llevó arrastrando hasta la clase.
- El irresponsable soy yo, no tú - dijo Zack pensando que era un buen pretexto para llevárselo.
Pero no lo era, lo único que quería era seguir esperando ahí hasta volverla a ver.
Extrañamente, Zack fue el primero en regresar la mente a la clase, anotó lo último que dijo el profesor y dio otro suspiro, ésta vez de alivio porque no lo descubrieron distraído. Tomó su mochila y cuando volteó a ver a Daniel, este seguía completamente perdido.
- Tierra llamando a Daniel - el chico apenas lo miró - ¿Sigues suspirando por la misteriosa chica? - Daniel apenas asintió con desgana - ¡Estás loco hermano! Mira que es la primera vez que te veo así de mal.
- Pero no fui el único así - Zack frunció el ceño - tú también has estado muy distraído, ni creas que no me di cuenta.
- No se te va nada ¿verdad? - Daniel lo negó y empezó a recoger sus cosas.
Pronto los dos estaban caminando entre los pasillos, Daniel buscaba a Nicole lo más discretamente que podía. Sólo que Zack ya lo conocía de más como para no intuirlo.
- ¿No te había dicho ella que ella misma te iba a buscar?
- Sí, lo dijo, pero no puedo esperar a eso.
Zack mal miro a su amigo. Daniel sintió la mirada y lo imitó.
- ¿Qué?
- ¿Por qué no puedes esperar? ¿Porque es la única que no te hace caso?
- No es eso. Esa chica me encantó desde que la vi. Es que... si la conocieras sabrías porque me trae así de loco.
- ¿Tanto como para olvidar a tu hermana?
- ¿A mi hermana? - preguntó sin entender - ¿A qué te...? - entonces lo recordó. Se puso una mano en la frente y no pudo ocultar su gesto. Efectivamente, se acordó en ese instante de que se fue tan rápido que olvidó que habían llevado el coche de su hermana al taller y que se había comprometido a llevarla a la escuela - lo olvidé.
- Me di cuenta.
- ¿Tú? ¿Por qué? ¿Cómo?
Zack giró la mirada y trató de disimular cómo se sonrojaba de sólo mencionar a Romina. Pero terminó contándole todo lo sucedido. Daniel al inicio se sentía mal, pero conforme avanzó Zack su relato, su rostro tomó otro giro, el de la complicidad.
- Entonces no te fue tan mal ¿eh?
- Pues no... - tosió fingidamente - no.
Daniel giró los ojos sonriendo. Llevaban tiempo conociéndose y no era un secreto que su amigo adorara a su hermana. De hecho, un día pensó que ellos dos harían una buena pareja, aunque sabía que su hermana siempre aspiraba a más que un simple... Zack.
Cuando llegaron al salón de Proyectos Arquitectónicos II, ambos sacaron sus planos y los desplegaron en las mesas. Daniel no pudo evitar mirar el plano de su amigo, quedó boquiabierto.
- ¿Cuánto tiempo tardaste en hacer esto?
- Ohm... - Zack se quedó pensándolo - pues, unas horas.
- ¿Unas horas? - preguntó asombrado - tú siempre me sorprendes. Cada vez que nos pide algo urgente es cuando te luces más, siempre que estamos juntos haciendo los planos no te quedan así.
- Tengo mis secretos - dijo orgulloso, y era verdad. Tenía secretos que no podía revelar a nadie, capacidades que pocos entenderían y sueños que nadie sabía descifrar.
Pero Zack no era el único con secretos que esconder.
A dos edificios se encontraba esa chica misteriosa, pensando en cosas completamente diferentes a las del chico que seguía suspirando por ella, con la esperanza de que lo volviera a encontrar.
3 comentarios:
Ya que sigo viva y volvió la luz a mi casa después del terremoto, puedo decirte que me encantaron los caps que no había podido leer!! sigue así y publica más caps luego
saludos! besos!
q buen cap:)
Gracias a sus comentarios nos animan a seguir :D
Publicar un comentario